Un coche con amortiguadores desgastados o rotos rebotará bastante y podría balancearse o hundirse excesivamente. Todas estas situaciones pueden hacer que el viaje sea incómodo; además, dificultan el control del vehículo, especialmente a alta velocidad.
Además, los puntales desgastados o rotos pueden aumentar el desgaste de los demás componentes de la suspensión del vehículo.
En una palabra, los amortiguadores y puntales desgastados o rotos pueden afectar gravemente el manejo, el frenado y la capacidad de tomar curvas de su automóvil, por lo que deberá reemplazarlos lo antes posible.
Hora de publicación: 28 de julio de 2021